CARTAGENA DE INDIAS. PLACER Y TRABAJO - Y ISLA DE BARÚ y ZONA AMURALLADA-

miércoles, 2 de abril de 2014



26-03-14.

Hoy hace un mes exacto que salíamos de Ibagué para venir a Cartagena de Indias. Nuestro primer vuelo desde que salimos hace ya casi 5 meses de Barcelona y en los que hemos hecho 281 horas o lo que es lo mismo, 11,70 días en autobuses.
Y aquí aterrizamos a las 2 de la tarde después de una hora de vuelo desde Bogotá y de haber salido de Ibagué a las 6 de la mañana. Volamos con la compañía LAN por 117.000 pesos (42€) y nos ahorramos las 20 horas que hubiéramos tardado en bus.          

Un poco de su situación e historia:

Cartagena de Indias está ubicada al norte de Colombia y a orillas del mar caribe. Fue declarada por la UNESCO Patrimonio Cultural de la Humanidad en 1984. Fundada el 1 de Junio de 1533 por Pedro de Heredia, quién buscaba un sitio con agua corriente para acampar y llegó al pueblo indio de Calamar (donde hoy está el Centro Amurallado). La llamó Cartagena de Poniente, para diferenciarla de Cartagena de Levante en España, por su similitud a la bahía de esta última.

Desde su nacimiento en 1533 hasta la Declaración de Independencia Absoluta de España en 1811 transcurrieron casi 3 siglos en la Época de la Colonia, cuando Cartagena fue de las más importantes ciudades de la Corona Española en tierras americanas. Por allí salieron gran parte de las riquezas que la Corona acumulaba, principalmente oro, en barcos que llegaban hasta los puertos de Cádiz y Sevilla, en España. Cartagena se convirtió en uno de los mayores puntos de comercio, en especial de esclavos, que traían los españoles desde África. Por todo ello siempre estuvo en la mira de ataques piratas de ingleses, franceses y holandeses en busca de nuevas conquistas territoriales. Y por ello el rey Felipe II ordenó desde España la construcción de 11 km.de murallas y fuertes durante los siglos XVII y XVIII.

"La Heroica", como fue llamada la ciudad después de ser una de las primeras en declarar la independencia, se convirtió en 1991 en un distrito turístico y cultural.

Hasta aquí llegamos y aquí es donde iniciaremos una experiencia diferente a las vividas hasta ahora. Una experiencia diferente porque no va a ser una estancia igual a las otras, si no que vamos a hacerlo viviendo aquí.
Cómo explicamos al final de la entrada anterior, vinimos, además de para hacer turismo, para que Jordi trabaje de pasante en uno de los mejores restaurantes de Cartagena. Y esto será posible gracias a nuestros amigos de Ibagué, que se pusieron en contacto con su sobrino, dueño de dicho restaurante y que nos hará este gran favor. Así que llegamos con toda la ilusión y mucha expectativa, acompañados por Nana, amiga de ellos y que también trabajará en el restaurante, aunque ella sí con experiencia, ya que estudió y ha trabajado en cocina.

Al llegar al aeropuerto fuimos en taxi directos hacia la zona de Getsemaní, uno de los barrios más tradicionales y populares del centro histórico de Cartagena y donde hay muchos hostales con un ambiente mochilero, además de estar muy cerca de la zona amurallada y donde está el restaurante. Nana ya conoce esta zona así que vamos directos a su calle principal y buscamos donde alojarnos. Después de entrar en varios hostales que o están llenos o nos parecen muy caros, nos quedamos en Mystic House Hostal, por 25.000 pesos por persona y noche en dormitorio compartido para 10 personas. Acogedor y muy bien situado.
Dejamos las cosas y vamos a hacer nuestro primer contacto con la ciudad. Paseamos por la zona amurallada y Gestsemaní, que es lo más cercano. Habíamos dormido poco y teníamos la cabeza más en el restaurante que en el paseo.
Llamamos por teléfono a Juan Felipe y nos esperaba al día siguiente en el restaurante a las 12h.
Allá estuvimos puntuales, charlamos con él y quedamos en empezar al día siguiente.
El horario no está nada mal, desde las 11 de la mañana hasta las 3 y desde las 7 de la tarde a las 11:30 de la noche, con los sábados por la mañana y el domingo libres. Nada mal.
El primer día en Donjuán lo paso en el área fría (entradas frías y postres) junto a Manuel, el chico que me ayudará a aclimatarme a esta sección (muy interesante). Tenemos bastante boleo, como dicen por aquí, que significa mucho trabajo, follón, etc. Al día siguiente sigo en Donjuán, pero ya al tercer día paso a María que es donde me quedaría por el momento, con otro concepto de cocina, más conceptual y detallista, donde Alejandro Ramírez (chef y co-propietario) fusiona la cocina colombiana con otras cocinas del mundo como la asiática y la europea, influenciado por sus viajes y experiencias en restaurantes del mundo como Londres, Tokyo, México, etc...
De momento la experiencia está siendo muy enriquecedora e interesante, aprendiendo mucho e intentando coger agilidad y rapidez en la cocina, agradecido por este momento que me está tocando vivir.




La primera semana la dedicamos a buscar apartamento donde alojarnos. Tarea que se hizo complicada, ya que o son muy caros o están lejos del restaurante. También miramos habitaciones en casas compartidas, cosa que se hace mucho aquí, pero nada que se adaptara a lo que buscábamos. Pasaban los días y no encontrábamos nada hasta que por fin, en la zona de El Cabrero, a unos 100 metros de la zona amurallada y a unos 20 minutos caminando del restaurante, encontramos un edificio de apartamentos y por fin logramos encontrar uno perfecto, junto al mar y con piscina, pequeñito pero ideal.
 
 
 
    Y con unas fantásticas vistas: 

 Al fondo, la zona amurallada
    Y con esta estampa, qué más se puede pedir:



 Disfrutando de una buena comida en nuestro apartamento 
 
El primer domingo lo dedicamos a ir a la isla de Barú, a una playa conocida como Playa Blanca
 
No hace falta explicar el por qué de su nombre, ya que al contrario que las playas de Cartagena, estas sí son de arena blanca y aguas transparentes. Para llegar hay que ir en lancha, atravesando la Bahía de Cartagena desde el puerto La Bodeguita o muelle Los Pegasos, también conocido como "Muelle Turístico", cerca de la Torre del Reloj. Desde aquí desembarcan también las lanchas que van a Tierra Bomba y islas del Rosario. Tierra Bomba es la más cercana y la misma lancha que nos dejaba en Barú iba hacia islas del Rosario, donde también se puede hacer snorkeling o buceo. Hasta Barú hay una hora en lancha rápida, que con mala mar, cómo nos pasó a la vuelta, se hace algo pesado. También se puede ir desde el mercado de Basurto en bus y en barco para cruzar hasta la isla. Sin duda es mejor así, mucho más económico y tranquilo, pero nosotros pagamos la novatada porque esto lo supimos después.
 
    Aquí pasamos el día disfrutando de la playa y de un buen pescado. 
 
    Y ahora un poco de turismo por la zona amurallada. Una de las mejores y bien conservadas
    murallas de las ciudades amuralladas del mundo:
 
 
 


Al fondo, la zona de Bocagrande

Al fondo, vistas de nuestro edificio, pero el pequeñito



 






 
Y un mes ha pasado sin darnos cuenta, que es el tiempo que en un principio pensamos quedarnos. Pero hemos apostado por quedarnos otro mes más de momento. Y es que esta ciudad nos ha embrujado, tanto por su belleza cómo por su ambiente y su clima. Y los más importante, poder seguir en el restaurante aprendiendo este oficio y disfrutando haciendo lo que realmente te gusta y hace feliz.
La mochila seguirá guardada en un armario al menos por ahora y nuestras ganas de seguir descubriendo el mundo paradas en este lugar que sin danos cuenta nos está cautivando.
 
De momento hemos mostrado una pequeña parte, pero seguiremos viendo imágenes de Cartagena y conociendo esta ciudad un poco más, tal cómo nosotros lo vamos haciendo día a día. 


7 comentarios:

Unknown dijo...

Como pasa el tiempo!!!parece q fue ayer cuando os fuisteis y ya ha pasado casi medio añito...seguid disfrutando pareja q se os ve d lujo.Vaya vistas q teneis desde vuestro apartamento,igualitas a las del d aqui jejejeje.Un besazo

Unknown dijo...

Estamos mirando el restaurante por google y...se nos cae la baba jajajajaja, tu aprende,aprende y cuando vuelvas seremos tus conejillos d indias

Unknown dijo...

La verdad es que estamos disfrutando mucho, cada vez más happys, y un placer vivir con estas vistas, y sobre todo vivir y no turistear x aquí, ya estamos como en nuestra casa, jjjj. Y lo del restaurante ya lo ves, muy buena pinta ehhhh!, cocina exquisita y muy detallista. Alejandro es un gran chef, aprendiendo mucho de el. A la vuelta unos platillos y unas charlas los 4!!!! besitos chicos!!!!

Anónimo dijo...

Hola chicos!ya veo ke todo perfect y me alegro. Por aki tb bien esperando la semana santa. Ya contareis como se vive la s.santa alli, os parece buena idea? Nuchos besicos. Carol sancho

Unknown dijo...

Muy buenas! Sí, todo de maravilla, ya lo ves. Gracias! Buena idea, veremos cómo se celebra por aquí. Disfrutad mucho. Besos!!

Unknown dijo...

Alicia, Jordi. una mezcla de alegría y de ganas de alcanzarles en su aventura. Alegría de saber que están disfrutando y que se están gozando mi tierra. Janeth, Camilo y Yo les recordamos y soplamos para que siempre tengan buenos vientos.

Unknown dijo...

Muchas gracias! alegría la nuestra de ver que nos siguen y desean lo mejor para nosotros. Y disfrutando muchísimas de sus tierras y sus gentes. Muchos recuerdos y gracias de nuevo.

Publicar un comentario