Salimos en bus de San Martín de los Andes en dirección Pucón a las 6 de la mañana con la compañía Tur-Bus, donde paramos para coger el siguiente bus que nos llevará hasta Santiago de Chile. Llegamos a las 11 a Pucón y a las 11:30 salimos de allí. Tras 11 horas y media de trayecto llegamos a Santiago.
Nuestro interés por visitar Chile, además de por entrar en nuestra ruta lógica prevista, y por sus lugares imperdibles como son el desierto de Atacama, Santiago, Valparaiso, etc.., era reencontrarnos de nuevo con Alejandro, a quién conocimos hace 6 años en Tailandia.
En su casa estaríamos los próximos días para visitar Santiago, sin saber bien qué haremos ni en cuantos días. Nos dejamos aconsejar y llevar..
No podíamos haber tenido un mejor comienzo y bienvenida. Tras tantísimas horas de autobús, llegar a su casa y encontrarte con una barbacoa, cervezas, y amigos.. que casualmente estaban disfrutando de un partido de fútbol amistoso entre Brasil y Chile. Lo demás fueron presentaciones rápidas, deliciosa carne de vacuno chileno, y conversaciones muy esperadas tras el reencuentro, en esa maravillosa terraza de su departamento.
El día siguiente lo dedicamos a recorrer el centro, Palacio de la Moneda (donde el 11 de Septiembre de 1973 tuvo lugar el golpe de estado militar que derrocó al entonces presidente Salvador Allende), las calles de alrededor observando a sus gentes, para después subir al cerro de Santa Lucía y disfrutar así de las vistas de la ciudad.
Y por la noche cena típica Spanish con Alejandro:
El día siguiente seguimos con nuestra visita a Santiago, y recomendados por Ale recorremos el barrio de Bellavista, un barrio bohemio, de artistas, con mucho colorido y lleno de restaurantes muy turísticos. Encontramos uno más sencillo para la gente local donde disfrutamos de 2 vienesas chacareras (perritos calientes con delicioso queso fundido por encima), y unas patatas fritas muy ricas y nada aceitosas. Allí mismo cogemos un funicular que nos sube a Cerro San Cristóbal.
El Cerro San Cristóbal es parte del Parque Metropolitano de Santiago, el parque urbano más grande del mundo con más de 700 hectáreas.
Dedicamos la tarde a pasear, relajarnos en el césped y divisar las grandes vistas de la ciudad. También a refrescarnos jugando con los aspersores, que con la calor que hacía nos venían como agua caída del cielo!!!
Ya por la noche y después de un largo día, una buena cena en buena compañía. Conocimos a Cami, novia de Ale, quien nos deleitó con unos deliciosos panqueques salados.
Anteriormente Ale quiso compartir con nosotros un regalo que le hizo un amigo, nada más y nada menos que un pack de cervezas que nada más verlas nos alegró un montón! ESTRELLA en Chile!! entre ellas había un par de Voll-Dam, fue una bonita sorpresa. También recibimos la visita de su madre (Marisol), a quien Ale le había hablado mucho de nuestra visita, nuestro viaje y la amistad que teníamos con él, y tenía muchas ganas de conocernos. Con ella compartimos esas cervezas y conversaciones varias, fue un placer conocer a esa maravillosa persona, muy agradable y simpática, una belleza de mujer.
El fin de semana lo pasamos en la casa de playa de Ale, en Santo domingo, una zona de veraneo a hora y media de Santiago, junto a dos parejas más amigos de Ale y Cami, Caro-Coque y Caro-Camilo. Podemos decir que hemos pasado unos días llenos-full de comida, bebidas, charlas, risas.. harto bueno!!!
Preparando nuestra aportación, la tortilla de patatas. Rica rica
Y la sorpresa del día en el puerto fue poder ver a estos otros amigos que no nos esperábamos, los pelícanos y lobos marinos que esperan la comida que la gente del puerto les va dando..
(Con la ilusión de poder ver pelícanos, que no los habíamos visto nunca, y lo mejor, tan cerca)
El pelícano común es un ave que llega a medir 1.75 metros de altura y cerca de 3 metros de envergadura (con las alas abiertas). Pesa cerca de 14 kg, siendo el ave más pesada que vuela (recordando que otras aves más pesadas como los pingüinos y las avestruces no vuelan).
Su mandíbula superior es sólida y estrecha, y termina en un gancho filoso, lo cual les permite sujetar los peces. En su mandíbula inferior le cuelga una gran bolsa llamada gular, que es de una piel flexible que les sirve para pescar, y también para exhibirlas en el cortejo con las hembras. Además poseen una pequeña lengua. Los pelícanos pueden llegar a vivir hasta más de 25 años.
No pueden volar con la bolsa gular llena, porque eso les hace perder la estabilidad. En las patas tienen dedos palmeados con una membrana que les permite nadar y moverse con facilidad en el agua.
Pone de uno a tres huevos. Los polluelos son incapaces de cazar por sí solos, ellos introducen sus picos en la garganta de sus padres para hacerlos regurgitar y así alimentarse. Los polluelos son muy ruidosos y forman un tremendo alboroto cuando quieren comer, en cambio los pelícanos adultos son prácticamente mudos.
Las diferentes clases de pelícanos habitan en el sureste de Europa, sur y centro de Asia, América y África. La mayoría de los pelícanos viven en mares abiertos, costas, lagos y ríos, en su gran mayoría en lugares tropicales o templados. Se estima que existen desde hace 30 millones de años.
Son excelentes pescando, y se adaptan muy bien al agua. Se sumergen a grandes profundidades, y por lo general pescan en equipo llevando a los peces hasta aguas menos profundas para poder atraparlos con facilidad. Comen hasta dos kilos de peces al día y es muy común verlos en los barcos, muelles y en los puertos.
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